En 2023, el colectivo de arte Street Art Cancún me invitó a formar parte de la residencia artística del proyecto Villa de Colores, una iniciativa que busca transformar la realidad de un sector afectado por la violencia: Villas Otoch Paraíso, en la ciudad de Cancún, Quintana Roo.
Durante la residencia desarrollé el diseño para uno de los muchos murales que hoy están cambiando el rostro de esta comunidad. Mi propuesta tenía como objetivo celebrar la identidad de las niñas y mujeres del sector, resaltando la fuerza que habita en su color de piel y en la potencia simbólica de sus cabellos. Quise rendir homenaje a su valentía, amor propio y resiliencia.
En un país como México, donde gran parte de la población luce muy distinta a las imágenes promovidas en la publicidad y la televisión, mi intención era que, al pasar frente al mural, las niñas y mujeres locales pudieran sentirse, aunque fuera un poco, representadas e identificadas.
El proceso de creación fue profundamente enriquecedor y contó con la participación activa de la comunidad, especialmente de los niños y niñas del barrio, quienes ayudaron a pintar y compartieron preguntas y reflexiones que nutrieron el sentido del proyecto.
